Aún recuerdo el primer día que te conocí. Me pareciste una persona increíble, una persona que se podía confiar en ella. Empezamos a hablar, y cada día, sin quererlo, yo pensaba un poco más en ti que el día anterior. Esas risas, esas miradas.. ahí había algo más que una simple amistad. Eras mi último pensamiento al dormir y el primero nada más despertarme. Me paré a pensar, estaba enamorándome. ¿Malo? Puede ser, cuando la persona que más quieres está a 500 km. ¿Por qué todo es tan difícil? Quiero abrazarle, dormir con él, poder ver su sonrisa sin ninguna pantalla de por medio. A veces siento que nunca le podré ver la cara en persona, y otras veces siento que en un futuro podemos estar juntos. El tiempo lo dirá todo.. Mientras tanto, habrá que esperar, aunque se sufra, aunque se llore.. es el camino que hemos elegido.
Susanna Storm.
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